La ciudad instrumentó limitaciones de horario para las embarcaciones de alquiler, dando un paso audaz para atender las quejas de los residentes sobre el ruido.
Los habitantes de Miami Beach no se quedaron callados y la Comisión de la Ciudad ha escuchado. Frente a una avalancha de quejas sobre el ruido y las perturbaciones causadas por las embarcaciones de alquiler comerciales, la ciudad optó por actuar. Aunque el dicho sostiene que “en casa del herrero, cuchillo de palo”, Miami Beach está decidida a romper con esa norma.
La Comisión votó unánimemente para limitar las horas de operación de los barcos chárter comerciales que operan no solo en la Marina de Miami Beach, propiedad de la ciudad, sino también en cualquier otra instalación marina pública. Alex Fernández, Comisionado de Miami Beach, subrayó el impacto que estos barcos habían tenido en la calidad de vida de los residentes, especialmente durante las horas nocturnas. “Demasiados barcos, demasiadas drogas, demasiado alcohol y demasiada música a todo volumen”, señaló Fernández a “Yusnaby” Rodríguez en Telemundo 51 Miami.
La nueva ordenanza, que entró en vigor el 8 de mayo de 2023, establece que los operadores de barcos chárter comerciales deben finalizar sus operaciones antes de las 9 p.m. y pueden retomarlas a partir de las 7 a.m. del día siguiente. Entre las restricciones se incluyen:
- La operación de un barco comercial
- La formación de filas de pasajeros
- El embarque o desembarque de pasajeros
- La carga o descarga de alimentos, bienes, equipo, combustible o suministros
Esta medida no afecta a los barcos no comerciales, barcos de pesca comercial, barcos de buceo comercial y recorridos educativos o de la naturaleza que estén debidamente registrados con el operador de la marina, según informó NBC Miami.
Las primeras infracciones se penalizan con una multa civil de USD 500, mientras que la segunda infracción en un lapso de seis meses eleva la multa a USD 1,000. Si las infracciones continúan dentro de ese mismo semestre, la multa se incrementa a USD 2,000. Además, durante periodos de gran afluencia turística, como el spring break o el Memorial Day, aquellos que quebranten la norma podrían enfrentarse a la suspensión de su licencia para operar.
Fernández subrayó que esta ley es crucial para proteger la calidad de vida de los residentes. “Queremos que las personas puedan descansar durante las horas nocturnas y asegurarnos de que estas operaciones sean responsables, que controlen la música, que controlen las drogas y el alcohol, porque no queremos que nuestras vías marinas sean inseguras”, remarcó a Telemundo51 Miami.
Famosa por su agitada vida nocturna y su próspera industria del turismo, la ciudad de Miami Beach deja claro que no dudará en adoptar decisiones para resguardar a sus habitantes. La esperanza recae en que esta flamante regulación contribuya a disminuir el estruendo excesivo que producen las embarcaciones de alquiler durante la noche, optimizando de esta forma la calidad de vida de los residentes en el barrio de South Beach.
Por ahora, parece que las fiestas nocturnas a bordo de los barcos chárter en Miami Beach tendrán que ajustarse a un nuevo horario. Solo el tiempo dirá si estas medidas serán efectivas para garantizar un equilibrio entre el floreciente turismo de la ciudad y la paz y el bienestar de sus residentes. Como dice el dicho, “No todo lo que brilla es oro”, pero en este caso, parece que Miami Beach está decidida a hacer que su brillo sea un poco más amigable para los residentes.